No, shegüita, a G. no lo conoce nadie en este blog ni en los que solemos frecuentar. Nos conocemos desde la secundaria, o sea, algunos "meses". Pero nuestra relación ha tenido altibajos, ya que su hoy ex mujer lo mantuvo "secuestrado" durante años. Hace unos meses volvimos a retomar nuestra amistad y pareció como si nunca hubiéramos dejado de vernos. Y hoy, cuando nos encontramos, ya sea en persona o en el chat, podemos conversar por horas sin quedarnos nunca sin tema para hablar.
Pero en el tema mujeres tenemos amplias diferencias, que hace que, a veces, yo me haga la pregunta 1 de esta entrada. Para G., una mujer tiene que tener una cara bonita. Si pasa ese primer examen, se fija en que no sea muy flaca (tampoco demasiado gorda), que tenga un buen ir y un mejor venir. Recién si todas estas características están satisfechas, G. está en condiciones de entablar una relación. Yo, por el contrario, si bien aplico alguno de esos "filtros" (es una reacción casi instintiva de hombres y mujeres, no me digan que no), me permito ver más allá de la parte física. Yo me fijo en que sea elegante (no digo que vaya cubierta de Dior, Vuitton y todas las grandes marcas, sino que sea mínimamente prolija al vestirse, peinarse, etc.), inteligente, culta y de una conversación agradable. Por supuesto, a los 20 tenía otros parámetros, pero a los 55 uno va modificando sus preferencias.
Resultado de esto, G. se casó con una hermosa mujer de físico ciertamente envidiable que no sólo lo apartó de sus amistades sino que lo terminó traicionando de la peor manera que una mujer puede traicionar a un hombre. Yo, por el contrario, si hubiera sido tan estricto como G. al fijarme en el otro sexo, me habría perdido de conocer a una mujer fabulosa y encantadora con quien compartí los mejores 25 años de mi vida.
Saquen ustedes sus conclusiones.
(Ana, si considerás que este post es abuso de blog, te autorizo a eliminarlo)
12 comentarios:
comentarios de sheguas!!
me hicieron reir a mi también!
y son recuerdos que uno no puede olvidar fue en nuestra etapa de la vida. besos milecy buen comienzo de semana
Pero, las dijiste vos?
Agus:
Siiiiiii obvio, son sheguas hermosas y divinas!.
Carlos: Estas más que recuerdos se dieron en el contexto de "charlas de mujeres" ambas super actuales y fresquitas!!!!!!!
Mell: No, no: la primera la dijo mi sobrina y la segunda una amiga.
Ay Mel con una sola L y me quedé pensando... vos preguntas porque queres jugar al TEG???? avisame!!!!!!
jajajajaja
Bueno, esto ya no es parte de mi vida. Empiezo a respirar aliviado...
¡Jajajaja!
Muy buenas frases....pero la q mas me gusto fue la 2da.
beshotes trola!!!
Jajajajjaa... genial la segunda frase.
Decí que el TEG siempre me termina aburriendo, que si no.....
;¬)
La frase 1, y aunque esto me lleva habitualmente a discusiones sin fin con mi amigo G., se puede aplicar perfectamente bien a los hombres.
Marito: solo te doy un respiro! jaja
Anita: Hola amiga!!! siiiii la segunda es mortal!!!!!!!
Mecha: Noooooooo a mi nunca me agota el TEG, puedo pasarme horas jugando y con un dado solo! ;)
Marito: Si si la frase va para ambos sexos!!!!! por cierto quién es G, lo conozco??? DA NOMBRE!!!!!!!
No, shegüita, a G. no lo conoce nadie en este blog ni en los que solemos frecuentar. Nos conocemos desde la secundaria, o sea, algunos "meses". Pero nuestra relación ha tenido altibajos, ya que su hoy ex mujer lo mantuvo "secuestrado" durante años. Hace unos meses volvimos a retomar nuestra amistad y pareció como si nunca hubiéramos dejado de vernos. Y hoy, cuando nos encontramos, ya sea en persona o en el chat, podemos conversar por horas sin quedarnos nunca sin tema para hablar.
Pero en el tema mujeres tenemos amplias diferencias, que hace que, a veces, yo me haga la pregunta 1 de esta entrada. Para G., una mujer tiene que tener una cara bonita. Si pasa ese primer examen, se fija en que no sea muy flaca (tampoco demasiado gorda), que tenga un buen ir y un mejor venir. Recién si todas estas características están satisfechas, G. está en condiciones de entablar una relación. Yo, por el contrario, si bien aplico alguno de esos "filtros" (es una reacción casi instintiva de hombres y mujeres, no me digan que no), me permito ver más allá de la parte física. Yo me fijo en que sea elegante (no digo que vaya cubierta de Dior, Vuitton y todas las grandes marcas, sino que sea mínimamente prolija al vestirse, peinarse, etc.), inteligente, culta y de una conversación agradable. Por supuesto, a los 20 tenía otros parámetros, pero a los 55 uno va modificando sus preferencias.
Resultado de esto, G. se casó con una hermosa mujer de físico ciertamente envidiable que no sólo lo apartó de sus amistades sino que lo terminó traicionando de la peor manera que una mujer puede traicionar a un hombre. Yo, por el contrario, si hubiera sido tan estricto como G. al fijarme en el otro sexo, me habría perdido de conocer a una mujer fabulosa y encantadora con quien compartí los mejores 25 años de mi vida.
Saquen ustedes sus conclusiones.
(Ana, si considerás que este post es abuso de blog, te autorizo a eliminarlo)
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